Dos vuelos con migrantes venezolanos deportados de Estados Unidos llegaron la madrugada de este martes a Venezuela, después de que el gobierno de Nicolás Maduro autorizara su llegada al país.
Los 190 migrantes que, según la agencia AFP, viajaron en los dos aviones de la estatal aerolínea Conviasa son los primeros deportados tras la reunión que Richard Grenell, enviado especial de Donald Trump, mantuvo con el presidente venezolano en Caracas a finales de enero.
«Acaba de aterrizar el primer avión de la línea aérea bandera de Venezuela, Conviasa, para traer de manera segura, amorosa, apropiada, digna, a este primer grupo de retornados a Venezuela», declaró Maduro en su programa de televisión semanal.
«Hemos dado un paso favorable, positivo», agregó en tono de celebración el gobernante.
Previamente, en un comunicado, el Ministerio venezolano de Comunicación informó que fue notificado por Washington de que entre los deportados había «algunas personas» que «están presuntamente ligadas a actividades delictivas, o estarían involucrados en las acciones de la banda criminal ‘Tren de Aragua'».
Por su parte, la Casa Blanca anunció, en su cuenta de X, que la reanudación de las deportaciones era un paso para «hacer de EE.UU. un país seguro, otra vez».

Revisión minuciosa
En la pista del aeropuerto internacional de Maiquetía, a unos 30 kilómetros al norte de Caracas, los expulsados fueron recibidos por el ministro de Interior, Diosdado Cabello, quien destacó la forma cómo llegaron.
«Hay que ver la condición en la cual están llegando (…) lo primero que hicieron fue cantar el himno nacional en una muestra de sentirse ya en su país, sentirse en su patria», aseguró Cabello.
Algunos de los deportados llevaban esposas, las cuales les fueron removidas antes de bajar de las aeronaves donde les esperaba un corredor con centenares de policías y militares, reportó AFP.
Antes los anuncios de que entre los expulsados había presuntos criminales, Cabello anunció que todos serían sometidos a revisiones.
«De aquí van a migración y van a pasar por un chequeo personal, y la revisión de aquellos casos en los cuales haya algún tipo de antecedente penal será revisado directamente. Es una responsabilidad nuestra que este proceso salga como debe salir», indicó el funcionario.
Sin embargo, el gobierno venezolano, en su comunicado previo, denunció «una narrativa falsa y malintencionada» respecto al «Tren de Aragua», la cual aseguró se utiliza para «penalizar a todos los migrantes venezolanos y estigmatizar a nuestro país».
«La mayoría de los migrantes son personas decentes y trabajadoras», señaló el ejecutivo de Maduro en su texto.
Por su parte, la Cruz Roja Venezolana, en un comunicado, informó que 40 de sus médicos y socorristas voluntarios brindarán atención humanitaria a los migrantes devueltos.
