La reunión en Riad es la primera que mantienen altos funcionarios rusos y estadounidenses desde que empezó el conflicto en Ucrania.
El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, ofrece una conferencia de prensa tras la finalización de las primeras conversaciones entre las delegaciones rusa y estadounidense en la capital saudita, Riad. Se trata del primer encuentro que mantienen altos funcionarios de ambos países desde que empezó el conflicto ucraniano.
Al comentar los resultados de las negociaciones, el canciller indicó que los representantes de Rusia y EE.UU. abordaron la disposición de las grandes potencias en cualquier situación a mantener un diálogo normal y tratar de escucharse mutuamente.
Lavrov calificó el diálogo de «muy útil», destacando que la parte estadounidense «empezó a entender mejor nuestra postura».
En lo que respecta a los compromisos alcanzados, el ministro ruso manifestó que ambas partes acordaron acelerar el nombramiento de embajadores y eliminar problemas en el funcionamiento de sus misiones diplomáticas.
Conflicto en Ucrania
Además, se abordó el tema de la solución del conflicto armado en Ucrania y se acordó que «se formará un proceso» de arreglo de la situación. Ambas partes designarán a sus representantes, indicó Lavrov. «Tras ello, se iniciarán las consultas pertinentes, que tendrán carácter regular», detalló.
«A medida que avancen los procesos relacionados con la resolución de la crisis en Ucrania, [se acordó] crear en paralelo las condiciones para que nuestra cooperación se reanude por completo y se extienda a diversos ámbitos«, señaló el jefe de la diplomacia rusa.
«Hubo un gran interés, que compartimos, en reanudar consultas sobre problemas geopolíticos, incluidos diversos conflictos en diferentes partes del mundo donde tanto EE.UU. como Rusia tienen intereses, y hubo un gran interés en eliminar los obstáculos artificiales en el desarrollo de una cooperación económica mutuamente beneficiosa», precisó.
Lavrov recordó que el presidente de EE.UU., Donald Trump, fue el primer líder occidental en «afirmar claramente que arrastrar a Ucrania a la OTAN es una de las principales razones de lo que está ocurriendo, que se trata de uno de los mayores errores de Biden y de su administración y que si Trump hubiera sido el presidente no lo habría permitido». En ese contexto, recordó que el presidente ruso ha destacado en repetidas ocasiones que la ampliación de la OTAN es «una amenaza directa a los intereses de la Federación de Rusia y una amenaza directa a nuestra soberanía».
En estas circunstancias, Moscú no tolerará el despliegue del contingente militar de los países de la OTAN en territorio ucraniano. «La aparición de fuerzas armadas de los mismos países de la OTAN, pero bajo una bandera ajena, bajo la bandera de la Unión Europea o bajo banderas nacionales, no cambia nada a este respecto. Esto es inaceptable para nosotros, por supuesto», dijo Lavrov.
- Mientras la representación rusa está a cargo del propio canciller y del asesor presidencial para Asuntos Internacionales, Yuri Ushakov, la delegación estadounidense incluye al secretario de Estado, Marco Rubio; al asesor de Seguridad Nacional, Mike Waltz, y al enviado especial de la Casa Blanca para asuntos de Oriente Medio, Steve Witkoff
- El pasado sábado, Lavrov y Rubio mantuvieron una conversación telefónica. Según la Cancillería rusa, las dos partes «acordaron mantener contactos regulares, incluyendo la preparación de una cumbre de alto nivel» entre ambos países
- Previamente, el pasado miércoles, Putin y Trump mantuvieron su primera conversación telefónica desde el regreso del líder republicano a la Casa Blanca. El diálogo se centró en iniciar labores para acordar posibles soluciones al conflicto ucraniano